Llegó el encanto de diciembre. Nada como empezar el mejor mes del año con buenas películas que nos ilusionen a que por fin vamos a tener un mes lleno de éxitos cinematográficos, y todo inició con «Encanto», la última entrega de Disney contextualizada en la cultura colombiana y que trae una historia bastante interesante de analizar.
Iniciemos con lo bueno de la cinta. Sin duda es un encanto de película que hace honor a su nombre, pero también a ese realismo mágico de Colombia del que tanto se habla dentro y fuera del país. Ese que nos llegó a través de la pluma Garcia Marquez y la hermosura de su biodiversidad. Creo que todo esto fue muy bien retratado en la cinta, es el eslabón más fuerte del film y lo transmite de manera natural haciendo uso de los elementos más icónicos de la cultura neogranadina, pero llevándolos en un contexto agradable para cada persona, sea o no sea de Colombia.
Ya hemos visto este tipo de tratamiento en películas de Disney, como «Coco» o «Luca». La verdad es que más allá de ser una estrategia para llegar a cada rincón del planeta con gran furor, son piezas excelentes que resaltan valores culturales muy apreciados de manera respetuosa y amena. Así que por mí, pueden hacerlo con cada país del planeta, si las historias prosperan así de bien.
Porque debo resaltar que la historia en «Encanto» aparte de conversar del realismo mágico, va mucho más profundo, incluso puede digerirse de diferentes maneras dependiendo del espectador. Y es acá donde de pronto puede sentirse un poco densa para los más pequeños, repito, puede que si, puede que no, todo va a depender de cada uno, porque más allá de la magia la cinta nos dice que la armonía es la clave para que la magia de la casita Madrigal se siga manteniendo por miles de años más, y desde acá se desencadenan muchos mensajes más que nos llevan a pensar en la situación actual no solo de Colombia sino de todos los países latinos. La verdad que es muy fácil sentirse identificado con «Encanto»
Por otra parte vemos como tocan ligeramente el conflicto armado que ha vivido el país de manera respetuosa, puntual y transmitiendo la sensibilidad justa al espectador. Lo hace de manera sutil, pero contundente, la verdad es que te transmite muchísimo esas secuencias.
En materia técnica, como siempre Disney lo da todo, hay una escena que me supero por completo, cuando Luisa levanta a un par de burros y puede verse el detalle de sus vellitos en la espalda, me dejó perplejo el nivel de detalle con el que continua creciendo Disney. Me hizo recordar las pelusas que se veían en el suéter en la película «Soul». Sin lugar a duda me entusiasma ver lo que 10 años más adelante nos vayan a traer en nuevas producciones. Y sobra decir que hasta ahora para mí es digna candidata a llevarse la estatuilla como mejor película animada.
Pero no todo es un encanto, la película, como otras, también tiene ligeros baches que incluso son propios de Disney, es decir, vienen de caja. El principal, es el antagonista o la adversidad que nos acompaña, no se siente tan abrumadora como en ocasiones pasadas, o lo pondré en otras palabras, no nos transmite tanto como en otras ocasiones. La verdad en «Coco» era mas sencillo para el espectador simpatizar con el reto que tenían que superar nuestros personajes, el contexto ayudaba a que fuera más cercano. «Encanto» por sus características, hecha mano de una adversidad un poco menos llamativa y aunque sabemos de entrada que todo saldrá bien (aplica para casi cualquier cinta de Disney), esta parte pudo haber sido mejor desarrollada.
Resumiendo, «Encanto» es una digna película de Disney, una digna candidata al Oscar, una cinta que nos muestra la otra cara de la moneda que casi no cuentan los medios de comunicación, una película para disfrutar con toda la familia y de la que seguramente muchos colombianos se van a sentir nostálgicamente identificados.
Nos vemos en una próxima función.