Guardianes de la Galaxia 3 es la esperada conclusión de la trilogía dirigida por James Gunn, que nos trae de vuelta a la divertida y entrañable banda de héroes cósmicos que conocimos en 2014. En esta ocasión, los Guardianes se instalan en Knowhere, una estación espacial construida en la cabeza de un Celestial, donde intentan llevar una vida normal. Sin embargo, su tranquilidad se ve interrumpida por los fantasmas del pasado de Rocket, el mapache genéticamente modificado que esconde un oscuro secreto. Peter Quill, aún afectado por la muerte de Gamora, tendrá que reunir a su equipo para emprender una peligrosa misión que podría salvar la vida de Rocket, pero que también podría poner en riesgo el futuro de los Guardianes.
La película es un espectáculo visual y sonoro, con impresionantes efectos especiales, escenas de acción trepidantes y una banda sonora llena de clásicos del rock y el pop. El humor sigue siendo una de las señas de identidad de la saga, con diálogos ingeniosos y situaciones absurdas que provocan carcajadas. Los personajes están bien desarrollados y tienen una gran química entre ellos, destacando el carisma de Chris Pratt como Star-Lord, el líder del grupo; la ternura de Bradley Cooper como Rocket, el alma de la película; y la fuerza de Zoe Saldaña como Gamora, la guerrera que busca venganza.
Sin embargo, Guardianes de la Galaxia 3 también tiene un tono más dramático y emotivo que las anteriores entregas, explorando temas como la familia, la amistad, el perdón y el sacrificio. La película no escatima en momentos conmovedores y sorprendentes, que harán llorar y aplaudir a los fans. El director James Gunn logra cerrar su trilogía con maestría, ofreciendo un final satisfactorio y coherente para los personajes que nos han acompañado durante casi una década.
Guardianes de la Galaxia 3 es una película que no decepciona a los seguidores del Universo Cinematográfico de Marvel, que disfrutarán de una aventura épica, divertida y emotiva. Es también un homenaje al cine de ciencia ficción y fantasía, con referencias a obras como Star Wars, Regreso al futuro o El señor de los anillos. Y es sobre todo una celebración del amor por los cómics, por los héroes imperfectos pero valientes, por los marginados que se convierten en leyendas. Una película que merece ser vista en la pantalla grande y que nos deja con ganas de más.
