UN SUPER GUION

La piedra angular de este thriller dramático está concebida de una forma espectacular, ya que cuenta la historia en su justa medida, sin contar de más ni de menos, logrando que en 8 capítulos nos aferremos a la duda en cada circunstancia de la trama. Sus giros son casi perfectos, tanto en forma como en tiempo. Mark Bomback (Total Recall, The Wolverine) es el creador de esta historia, en la cual se ve significativamente el crecimiento del escritor desde la última vez que intentó incursionar en el género.

HISTORIA

Basada en el libro “Defending Jacob” del autor William Landay, este relato trata sobre un crimen en un poblado de Estados Unidos y las consecuentes dudas que se crean sobre el crimen, aunque esa es solo una de las muchas cosas que enganchan de la serie. También atrapa toda la trama psicológica que maneja y el trasfondo dramático que posee cada secuencia, dejándonos pensar por horas después de cada capítulo. 

LAS ESTRELLAS

Las figuras, y por mucho los mejores de esta miniserie, son Michelle Dockery (Non-Stop, Gentleman) y Jaeden Martell (It, Knives Out, The Book of Henry). Dockery logra la mejor actuación de su trayectoria, nos sorprende con una interpretación grandiosa con la cual podemos empatizar enormemente, su performance es más que sólido y es oro en esta serie. Martell es igualmente excepcional, a su corta edad soporta toda la trama como un actor de trayectoria. Si sigue así, no dudamos que logre ser ganador de un Oscar muy pronto.

TODO EL REPARTO

Esta serie tiene un elenco de lujo, además de los mencionados anteriormente. Cada cast fue más que acertado, absolutamente todos son geniales, ni el más mínimo cameo o extra decepciona.

J. K. Simmons es majestuoso y nos deleita incluso como actor invitado. Chris Evans que también es productor de la serie, aunque con un rango actoral más limitado, también hace la mejor interpretación de su historia.

LA DIRECCIÓN

Se agradece cuando una serie tiene solo uno o dos directores, ya que esto le da consistencia. En este caso es Morten Tyldum (The Imitation Game) quien agrega un valor cinematográfico de calidad. El ritmo que aplica en general es muy bueno, salvo en algunos pasajes que marchan un poco más lento, aunque esto es compensado con actuaciones brillantes. La dirección de montaje es genial a pesar de no ser tan original. La dirección de fotografía es en parte un personaje más, es oscura y azul sin importar el contexto, provocando que notemos un drama deprimente y sin esperanzas. 

EN RESUMEN

Defendiendo a Jacob es, sin duda alguna, una de las mejores –si no la mejor– serie de misterio que se ha realizado, con un reparto que cumple ejemplarmente cada caracterización. Tal vez la única falla de la serie sean las pinceladas de melodrama que no eran necesarias pero que tampoco opaca en lo absoluto la robustez y lo grandioso de la historia. Esta miniserie es el inicio serio de Apple en la competencia entre plataformas, como lo fue House of Cards para Netflix en su momento.